Agripalma, Leonurus cardiaca
La agripalma o Leonurus cardiaca es una planta perenne, originaria del Este de Europa, que contiene flavonoides y ácidos fenólicos y ha sido muy utilizada tradicionalmente en la medicina natural por sus propiedades beneficiosas.
Son estas propiedades las que hicieron que la agripalma se extendiese por el resto de Europa como planta medicinal. Actualmente está presente en todo el continente y suele darse en zonas bajas o a los pies de las colinas en áreas rurales. En España, concretamente, se ha encontrado de forma silvestre en la zona norte de la Península, de hecho, es la única especie del género que se ha encontrado. Generalmente crece cerca de monasterios, tanto habitados como en ruinas y, además de como agripalma, se suele conocer por otros nombres populares como cola de león, cardiaca o mano de Santa María.
También se puede encontrar en áreas templadas del continente asiático como Irán, China o Japón y en el norte de África y América. De hecho, se han identificado alrededor de veintiocho especies del género leonurus, pertenecientes a la familia de las lamiaceae, repartidas por toda Eurasia. Además de una de ellas, que se ha localizado en América.
Descripción
Se trata de una planta que puede llegar a alcanzar entre los sesenta centímetros y el metro veinte de altura. Desprende un olor bastante característico y desagradable. Tiene hojas lobuladas, largamente pecioladas y pelosas de color verde oscuro en el haz y blanquecino el envés. Las flores, que aparecen de julio a septiembre, son muy vellosas, de color púrpura rosado y están repartidas en verticilos a lo largo de todo el tallo.
Propiedades
Una de sus principales propiedades es que ayuda actuando como calmante sobre el corazón, colaborando en la disminución de la presión sanguínea. Esta propiedad precisamente es la que le da su nombre. También se considera que puede tener propiedades emenagogas por su alcaloide, la leunucardina, y se ha recomendado, tradicionalmente, en casos de amenorrea. Se le considera también un sudorífico.
La ESCOP y la Agencia Europea del Medicamento (EMA) aprueban el uso tradicional de preparados de agripalma para el alivio de los síntomas de tensión nerviosa, incluidas sus manifestaciones cardiacas como por ejemplo palpitaciones, tras haber sido descartada la existencia de patología subyacente. Además, la Comisión E la acepta para alteraciones del ritmo cardíaco de origen nervioso y como coadyuvante en hipertiroidismo.
