En esta masterclass impartida por Mónica Pérez, Bióloga con Máster en Nutrición y especializada en microbiota, podrás informarte en profundidad sobre lo qué es el SIBO y cómo abordarlo de forma natural.
El SIBO o Sobrecrecimiento Bacteriano del Intestino Delgado es un trastorno gastrointestinal provocado por un crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado. Las bacterias se encuentran principalmente en el colon pero, en el caso del SIBO, se mueven hacia el intestino delgado, lo que puede provocar una serie de síntomas molestos como dolor abdominal, hinchazón, diarrea, estreñimiento, gases, entre otros.
Gracias a los microorganismos de la microbiota podemos aprovechar los alimentos al máximo. Estos, nos ayudan a hacer la digestión, nos proporcionan vitaminas, ayudan al sistema inmune, influyen en nuestro metabolismo e, incluso, se comunican con nuestro cerebro afectando a nuestra conducta y estado de ánimo. Un equilibrio en las funciones de nuestra microbiota, conocida como EUBIOSIS, es sinónimo de salud física y mental. Sin embargo, también existe un desequilibrio, denominado DISBIOSIS, que se relaciona con múltiples patologías como alergias, diabetes, obesidad, enfermedades autoinmunes, autismo, incluso cáncer.
Qué es el SIBO y cómo abordarlo
En esta masterclass encontrarás información sobre el sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado (SIBO) de la mano de Mónica Pérez, Bióloga con Máster en Nutrición y especializada en microbiota.
¿Qué es el SIBO?
El SIBO es una condición en la que hay un crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado. Esto puede causar una variedad de síntomas, como distensión abdominal, gases, diarrea y estreñimiento.
Tipos de SIBO
Hay tres tipos principales de SIBO:
- SIBO de hidrógeno: causado por bacterias que producen hidrógeno.
- SIBO de metano: causado por arqueas que producen metano.
- SIBO de sulfuro de hidrógeno: causado por bacterias que producen sulfuro de hidrógeno.
Causas del SIBO
El SIBO puede producirse por varios factores entre los que incluyen:
- Motilidad intestinal alterada: cuando los músculos del intestino no se contraen correctamente, las bacterias pueden acumularse en el intestino delgado.
- Disfunción de la válvula ileocecal: esta válvula separa el intestino delgado del intestino grueso. Si no funciona correctamente, las bacterias del intestino grueso pueden migrar al intestino delgado.
- Cirugía intestinal: la cirugía puede alterar la motilidad intestinal y aumentar el riesgo de SIBO.
- Medicamentos: algunos medicamentos, como los antiácidos y los opioides, pueden aumentar el riesgo de SIBO.
Diagnóstico del SIBO
El SIBO se diagnostica con mayor frecuencia mediante una prueba de aliento con hidrógeno y metano. Esta prueba mide la cantidad de hidrógeno y metano en el aliento después de que el paciente bebe una solución de azúcar.
Tratamiento del SIBO
El tratamiento del SIBO generalmente implica una combinación de antibióticos para reducir el número de bacterias en el intestino delgado, probióticos para restaurar el equilibrio de las bacterias buenas en el intestino, una dieta baja en FODMAP que puede ayudar a reducir los síntomas del SIBO y, finalmente, cambios en el estilo de vida como la gestión del estrés y el ejercicio regular.
Puntos adicionales
- El SIBO puede ser una condición compleja y difícil de tratar. En muchas ocasiones se necesita tiempo y paciencia para su tratamiento.
- Es muy importante trabajar con un profesional de la salud para desarrollar un plan de tratamiento individualizado.
- Puede confundirse con otras afecciones, como el síndrome del intestino irritable (SII).
El SIBO es una condición común que puede causar una variedad de síntomas, por eso, si se experimentan síntomas de SIBO, es importante consultar a un profesional de la salud para obtener un diagnóstico y un plan de tratamiento.
Es importante aclarar que la información proporcionada es solo con fines educativos y no debe utilizarse para el autodiagnóstico o el autotratamiento.
