Apio, Apium graveolens
El apio posee tallos estriados que forman una gruesa penca con hojas acuñadas. Toda la planta tiene un fuerte sabor acre, es decir, agrio. Aunque el blanqueo de los tallos en el cultivo hace que pierdan estas cualidades, adquiriendo un sabor más dulce y el característico aroma que al probarlo tiene un sabor diferente lo que lo convierte en un buen ingrediente de ensaladas y sopas.
Propiedades
Se emplean los frutos y también la planta fresca o seca, y la raíz. Tiene un efecto diurético y antiespasmódico. Popularmente se usa como aperitivo, eupéptico, carminativo, remineralizante, vitamínico, depurativo y como cicatrizante en uso externo.
También, popularmente, se emplea la planta o las raíces para estimular la función renal y “purificar la sangre”, en casos de reumatismo, gota, litiasis urinarias; como relajante en caso de insomnio y como tonificante cuando existe pérdida de apetito y astenia (remineralizante). Se afirma que tiene propiedades estimulantes de la libido.
El extracto de apio, rico en unos compuestos llamados phtálidos, purifica la sangre y estimula la eliminación renal de los uratos.