Acción:
Estos excelentes antioxidantes pueden usarse en trastornos degenerativos en general: en la vejez, para prevenir envejecimientos prematuros, en fumadores, personas que toman muchos medicamentos, personas expuestas a radiaciones, enfermedades autoinmunes, enfermedades de la piel, convalecencias, prostatitis, en situaciones de estrés, especial desgaste físico o psíquico, en cualquier situación que haga sospechar la presencia de radicales nocivos, etc. Protegen de las radiaciones ionizantes, de los efectos negativos del sol y de los contaminantes.
Pueden contrarrestar algunos efectos adversos de ciertos medicamentos para disminuir el colesterol, beta-bloqueantes, antipsicóticos de la familia de las fenotiacinas, antidepresivos tricíclicos, metildopa, hidroclorotiazida, clonidina o hidralazina.
Explicación:
La acción deseada se consigue por la combinación de:
Licopeno
El licopeno es un pigmento de color rojo 100% natural, perteneciente al grupo de los carotenoides sintetizados por las plantas y los microorganismos, pero no por los animales.
Se encuentra fundamentalmente en el tomate y los productos derivados, así como en pequeñas cantidades en otras frutas y vegetales. Por lo tanto, su consumo se ve limitado muchas veces, dependiendo de los hábitos alimenticios de cada uno. Además, el aumento de la edad está asociado con una disminución de la concentración de licopeno.
Los estudios científicos actuales indican que el licopeno puede ser una parte esencial del mecanismo de defensa natural del organismo frente a los nocivos agentes oxidantes, mutagénicos y carcinogénicos, por lo que sería bueno asegurar una adecuada ingesta en la dieta para el mantenimiento de una salud óptima.
Coenzima Q10 asimilada en levaduras
También conocida como ubiquinona, este potente antioxidante juega un papel fundamental en la producción de energía a partir de los alimentos.
Se encuentra en todas las células de plantas y animales. Nuestro organismo puede producir CoQ10 y además se obitene en pequeñas cantidades con la dieta. Sin embargo, es difícil conseguir dosis adecuadas de CoQ10 de los alimentos. Además, la producción normal en el organismo disminuye con la edad, por lo tanto, las personas de edad avanzada necesitan más CoQ10. El nivel normal de CoQ10 detectado en una persona de 40 años es un 30% inferior al de una de 20, y en una de 60 sobre un 60% menor.
Entre las diferentes formas de presentación, la coenzima Q10 asimilada en levaduras proporciona unos valores de absorción y biodisponibilidad muy superiores a los quelatos y a cualquier otra forma, ya que son prácticamente iguales a como se encuentran en los alimentos y su comportamiento fisiológico es idéntico a los naturales. La coenzima Q10 es integrada de una manera natural en organismos vivos, en este caso levaduras, con lo que se consiguen formas orgánicas totalmente naturales con un alto valor biológico. La CoQ10 orgánica asimilada en levaduras tiene una actividad antioxidante 9,6 veces mayor que la CoQ10 sintética y mayor que la de la vitamina C y E.
Selenio asimilado en levaduras
El selenio es un oligoelemento no metálico que obtenemos del agua y de los alimentos, especialmente de los mariscos, pescado, cereales y ajo. Es un excelente antioxidante capaz de neutralizar los radicales libres que podrían de otra forma dañar el material genético de las células y posiblemente, conducir a diversas enfermedades. Diversos estudios parecen apoyar su empleo específico para afecciones de la próstata e investigaciones previas sugieren que este nutriente podría ayudar a prevenir el tumor de próstata. El selenio disminuyó en más del 60% la incidencia de tumor de próstata entre los hombres participantes en un estudio sobre otros tipos de tumores, lo que ha despertado un gran interés y ha puesto en marcha uno de los mayores estudios de prevención de tumor de próstata realizado hasta ahora.