Acción:
Activador de la biogénesis mitocondrial de las células. Por tanto, aporta mucha energía nueva. Es antienvejecimiento porque crea mitocondrias nuevas. Efecto antioxidante muy potente, lucha contra el estrés oxidativo. Preventivo del daño cerebral, activador de sus funciones (memoria, atención, etc). Protector del corazón, aporta sangre al mismo, vitalidad. Protector de los hematíes. Regenerador nervioso. Alarga la vida porque mejora las funciones principales del organismo.
Explicación:
La pirroloquinolina quinona es un antioxidante natural que tenemos en nuestro organismo y que contribuye a la salud general por las múltiples acciones que tiene. Es un compuesto similar a las vitaminas que se encuentra en alimentos de origen vegetal y que tiene gran variedad de beneficios. Hay estudios preclínicos y la evaluación clínica. Aunque la PQQ no se considera actualmente como una vitamina, es probable que en el futuro sea considerada como nutriente esencial. La PQQ se ha encontrado en muchos alimentos vegetales. Algunos alimentos ricos en PPQ son el perejil, los pimientos verdes, el kiwi, la papaya, el tofu o el té verde. Estos alimentos contienen alrededor de 2-3 µg por cada 100 gramos. Cuando la PQQ se omite de dietas químicamente definidas en los mamíferos, esto conduce a alteraciones del crecimiento, estado inmunológico comprometido y función reproductiva anormal.
Los requisitos nutricionales de la PQQ son parecidos al ácido fólico y la biotina en términos de microgramos por día. Al igual que los nutrientes esenciales, el sistema inmune parece ser particularmente sensible a los niveles bajos de PQQ. Con la privación de la PQQ hay múltiples defectos en la función inmune y pérdida de células blancas de la sangre.
Dada la importancia nutricional y el gran abanico de efectos fisiológicos que tiene, existen considerables beneficios en relación a la baja función mitocondrial incluyendo el envejecimiento, muchos enfermedades del cerebro y neurológicas (Alzheimer y Parkinson), y muchos otros enfermedades degenerativas crónicas.
La investigación actual se ha centrado principalmente en su capacidad para proteger la memoria y la cognición en el proceso del envejecimiento de animales y humanos.
Éstos son algunos de los efectos observados en los estudios con animales:
- La PQQ revierte el deterioro cognitivo causado por el estrés oxidativo crónico y mejora el rendimiento en pruebas de memoria en modelos animales. Su gran potencial antioxidante se debe a que es una molécula con una llamativa estabilidad.
- Se ha comprobado que estimula la neurotrofina, que es un factor de crecimiento de tejido nervioso. Disminuye la placa amiloide en el Alzheimer y frena la atrofia cerebral. Preventivo de ictus y derrames cerebrales. La PQQ bloquea la formación de óxido nítrico sintasa inducible (iNOS), una fuente importante de especies reactivas de nitrógeno (RNS) que son muy perjudiciales para las células cerebrales. Protege al cerebro de neurotoxidad inducida por otras toxinas potentes, como el mercurio, el glutamato y la oxidopamina (una potente neurotoxina utilizada por los científicos para inducir parkinsonismo en animales de laboratorio). Previene el desarrollo de la alfa-sinucleína, una proteína asociada con la enfermedad de Parkinson.
- Promueve el flujo sanguíneo cerebro-vascular y cognitivo, órganos que consumen mucha energía.
- Protector del ADN mitocondrial, activa los genes generadores de nuevas mitocondrias.
- Produce por lo menos un 20% de creación de nuevas mitocondrias con el consiguiente impulso energético por formación de nuevo ATP. Activa los genes generadores de nuevas mitocondrias.
- Se ha visto en ensayos humanos que disminuyen los marcadores inflamatorios después de la toma de PQQ, así como se ha constatado el aumento rápido de potencial antioxidante.
- Alarga la vida, es un verdadero agente antienvejecimiento.
- Gran antioxidante (5.000 veces más potente que la vitamina C) que lucha contra el estrés oxidativo, destructor de muchas rutas metabólicas.
- Potencia al ácido R-lipoico y a la acetil L-carnitina en sus funciones para el buen funcionamiento mitocondrial.
- Protege el corazón porque aporta sangre, del cerebro y de los hematíes.
- Produce energía y vitalidad.