Acción:
La vitamina C es un micronutriente esencial con acciones pleiotrópicas relacionadas con su capacidad de participar en reacciones de óxido- reducción.
Funciona como un potente antioxidante que protege al cuerpo del daño generado por los radicales libres y desempeña un papel esencial en la síntesis de colágeno, necesario para el mantenimiento de todos los tejidos. La vitamina C además protege y mejora la defensa inmune al mantener varias funciones celulares del sistema inmune innato y adaptativo.
La inestabilidad de la vitamina C combinada con su relativamente pobre absorción y facil excreción reducen la disponibilidad fisiológica de esta vitamina. Esta incapacidad para mantener altos niveles séricos puede tener implicaciones para la salud, particularmente relevantes en el inicio y la progresión de enfermedades degenerativas que tienen un fuerte componente de daño oxidativo.
La vitamina C de Lipolife® Gold Vitamina C se suministra bajo la patente de Quali®-C. La liposomación optimiza tanto la biodisponibilidad y el mantenimiento de concentraciones plasmáticas altas, como la tolerancia a la ingesta de dosis elevadas de la vitamina.
Explicación:
Alta dosis de vitamina C con máxima absorción y biodisponibilidad.
Vitamina C
La vitamina C contribuye a:
- Reducir o prevenir el daño oxidativo, funcionando como un importante antioxidante fisiológico.
- Mantener la función normal del sistema inmunitario disminuyendo la incidencia y la duración de los resfriados comunes.
- La formación de colágeno para el mantenimiento de todos los tejidos, incluyendo vasos sanguíneos, cartílagos, huesos y encías.
- Un metabolismo energético normal.
- Un funcionamiento psicológico normal y del sistema nervioso.
- La síntesis de algunos neurotransmisores y carnitina.
- La reducción del cansancio y la fatiga.
- La regeneración de la forma reducida de vitamina E.
- La absorción de hierro.
Biodisponiblidad de la vitamina C
Dado que es un compuesto polar con un peso molecular relativamente grande, la vitamina C no puede atravesar fácilmente la membrana celular por simple difusión. Su flujo se controla por mecanismos específicos, incluida la difusión facilitada y el transporte activo, que están mediados por distintas clases de proteínas de membrana como los transportadores de glucosa (GLUT) y los cotransportadores de sodio y vitamina C (SVCT).
La biodisponibilidad, o la concentración efectiva de ácido ascórbico, dependen tanto de la absorción intestinal como de la excreción renal.
La vitamina C, que se consume con dieta o suplementos dietéticos, es absorbida por las células epiteliales del intestino delgado a través del transportador SVCT1 y, posteriormente, se difunde en capilares y el sistema circulatorio. En el riñón, el ácido ascórbico circulante se filtra y se reabsorbe en el lecho capilar a través de células epiteliales renales por el transportador SVCT1. Juntos, la absorción intestinal y la excreción renal determinan el nivel sérico de vitamina C y, por lo tanto, su biodisponibilidad. En bajas concentraciones, la mayoría de la vitamina C se absorbe en el intestino delgado y se reabsorbe del túbulo renal. Sin embargo, a altas concentraciones, el SVCT1 se satura, lo que, combinado con regulación negativa del SVCT1 mediada por ascorbato limita la cantidad de ácido ascórbico absorbido del intestino y reabsorbido desde el riñón. Esto impone una restricción fisiológica en la concentración sérica máxima efectiva de vitamina C (o su biodisponibilidad) que se puede lograr por consumo oral, estimándose que el valor máximo es de 200 mmol/L. (Figura 1)
Vitamina C, daño oxidativo y enfermedades degenerativas
La vitamina C bajo condiciones fisiológicas, funciona como un potente agente reductor que reduce eficientemente los radicales libres potencialmente dañinos producidos por la respiración metabólica.
Aunque la mayoría de los animales son capaces de sintetizar grandes cantidades de vitamina C de forma endógena, los humanos perdieron esta capacidad como resultado de una serie de mutaciones inactivantes del gen que codifica la gulonolactona oxidasa (GULO), una enzima clave en la ruta biosintética de la vitamina C, que cataliza el último paso de la vía biosintética.
Se estima que estos eventos mutacionales ocurrieron hace unos 40 millones de años, lo que hace que todas las especies descendientes, incluidos los humanos, tengan deficiencia de ácido ascórbico. El déficit agudo de vitamina C conduce al escorbuto, que se manifiesta por la fragilidad de los vasos sanguíneos, el daño del tejido conectivo, la fatiga y, en última instancia, la muerte.
Los seres humanos normalmente adquieren vitamina C de una gran variedad de fuentes dietéticas, a través de un mecanismo de transporte saturable de sustrato que involucra a los transportadores específicos de ascorbato. Debido a la saturación y baja expresión del transportador, combinada con la regulación a la baja inducida por el sustrato, las concentraciones de vitamina C en suero efectivas que se pueden alcanzar por ingestión oral son bajas.
Esta incapacidad para mantener el ácido ascórbico sérico y la consiguiente reducción de la capacidad antioxidante pueden dar como resultado un aumento del flujo de especies dañinas de oxígeno reactivas (ROS). El impacto del bajo nivel de vitamina c sérica y la consiguiente acumulación de ROS pueden tener efectos deletéreos sistémicos.
El impacto de bajas concentraciones de vitamina c en suero y la acumulación resultante de especies radicalarias oxidantes puede tener un gran efecto en el envejecimiento de las poblaciones y puede contribuir, en parte, a la alta incidencia de enfermedades degenerativas y las enfermedades del sistema cardiovascular. Por lo tanto, el tratamiento con altas dosis de vitamina C puede mejorar las enfermedades degenerativas relacionadas con la edad:
- Vitamina C, daño oxidativo y enfermedad cardiovascular: los efectos del estrés oxidativo en el sistema cardiovascular son múltiples y contribuyen a la manifestación clínica de la enfermedad cardiovascular. Incluyen:
- Apoptosis de células endoteliales inducida por ROS.
- Inducción de inflamación por modificación oxidativa de la expresión de genes proinflamatorios de y adhesión celular.
- Reducción de la biodisponibilidad intracelular del vasodilatador óxido nítrico (NO).
- Oxidación de LDL.
La vitamina C puede paliar todos estos efectos derivados de un exceso de estrés oxidativo.
Vitamina C y sistema inmune
La vitamina C actúa a diferentes niveles en el sistema inmune:
- Barreras epiteliales:
- Mejora la síntesis y estabilización de colágeno.
- Protege contra el daño inducido por ROS 1.
- Mejora la diferenciación de queratinocitos y la síntesis de lípidos.
- Mejora la proliferación y migración de fibroblastos.
- Acorta el tiempo de cicatrización de heridas en pacientes.
- Fagocitos (neutrófilos, macrófagos):
- Actúa como un antioxidante/donante de electrones.
- Mejora la motilidad/quimiotaxis.
- Mejora la fagocitosis y la generación de ROS.
- Mejora la actividad microbiana.
- Facilita la apoptosis y el aclaramiento.
- Disminuye la necrosis/NETosis.
- Linfocitos B y T:
- Mejora la diferenciación y la proliferación.
- Mejora los niveles de anticuerpos.
- Mediadores inflamatorios:
- Modula la producción de citoquinas.
- Disminuye los niveles de histamina.