Además el aceite esencial también posee cineol, acetato de bornilo, pineno, borneol y alcanfor. Su componente amargo es la aquilicina, lactona sesquiterpénica tipo guaianólico. También contiene flavonas, apigenol, luteolol y sus glucósidos, con propiedades antiespasmódicas; compuestos nitrogenados del grupo de las betaínas (betaina, stachidrina, betonicina, colina). Asimismo podemos encontrar en su composición taninos, ácido cafeíco, potasio, clorofila y trazas de compuestos acetilénicos.
Según ESCOP se puede utilizar por vía interna para la pérdida del apetito y trastornos dispépticos, tales como espasmos abdominales leves; y por vía externa para tratamiento de soporte de heridas pequeñas, inflamaciones leves de piel y mucosas y como repelente de insectos. La EMA acepta el uso tradicional de la sumidad florida y de la flor en caso de pérdida temporal del apetito y en el tratamiento sintomático de espasmos gastrointestinales leves, distensión abdominal y flatulencia, así como el empleo de la infusión en caso de espasmos leves asociados a la menstruación. Por vía tópica, acepta la infusión en el tratamiento de heridas superficiales pequeñas.