Acción:
Se pretende equilibrar la respuesta inmunitaria exagerada, y la hipersensibilidad a toxinas que se expresan en múltiples patologías.
Explicación:
Entre el calor-fuego de corazón, el vacío de Yin y sobre todo el calor tóxico, se genera un calor sobre la sangre que lleva a una situación de hiperactividad en el plasma asociado a hipersensibilidad inmunitaria, de ahí, las ulceraciones, las irritaciones, las pequeñas hemorragias, las infecciones, etc.
La sepsis es la respuesta inflamatoria sistémica ante la infección. Por lo tanto, además de los microorganismos y sus toxinas, lo que produce daño es la respuesta inflamatoria del organismo. La medicina prescribe antibióticos para los afectados, aunque los síntomas se produzcan por un exceso inmunitario, que no es lo mismo que deficiencia inmunitaria. Lo que el paciente necesita es un producto que actúe como enfriador.
Manifestaciones asociadas a este síndrome
El calor-tóxico se va a caracterizar por patologías como: angina, faringitis, otitis, fiebre elevada, acné, furúnculos, dermatitis, abscesos, peritonitis, colitis, psoriasis, apendicitis, mastitis, pancreatitis, etc.
Se utilizan plantas para inhibir el calor de sangre, el calor de hígado. Son enfriadoras y antitóxicas.